Con la finalidad de estudiar la afectación que pueden provocar los desastres naturales y fortalecer la acciones de protección civil, el especialista del Instituto Politécnico Nacional, Francisco Javier Aceves Hernández, creó seis prototipos didácticos que funcionan como simuladores mediante los cuales se puede recrear el desarrollo y posibles daños ocasionados por fenómenos como sismos, tsunamis, erupciones volcánicas, inundaciones, huracanes e incendios.
El catedrático e investigador de
El prototipo para simular tsunamis -dijo- consta de una pecera en la que se generan movimientos con un remo, a fin de que el agua recree olas que posteriormente impactan un área que simula una playa.
Aceves Hernández refirió que el prototipo para simular inundaciones también está construído con una pecera a la que se adaptaron laderas o pendientes y desde la parte superior se controla el paso de agua hacia un río. “Cuando se incrementa la presión del agua se empieza a desbordar el río y de ese modo se simulan los efectos de una inundación”, detalló.
En cuanto al simulador de erupciones, el especialista de
Indicó que con el prototipo experimental de huracanes y tormentas tropicales se hace sentir al público las condiciones similares a las generadas por fenómenos de este tipo. “Para simular las ráfagas de viento a altas velocidades que ocasiona un huracán, se diseño una estructura hexagonal de 1 por
Aceves Hernández, señaló que lo que se busca con el simulador de incendios es que el público pueda sentir el calor del fuego y apreciar el humo generado por un incendio simulado, pero de una manera segura, para lo cual se emplea un generador de humo y un calentador de aire eléctrico, los cuales se colocan en el interior y al pie de una estructura hexagonal de acrílico por donde sube el humo impulsado por las corrientes ascendentes de aire, que al calentarse es menos denso, y asciende permitiendo que alguien que introduzca la mano, sienta el calor y vea el humo generado.
El investigador politécnico indicó que estos prototipos contribuirán al estudio de los fenómenos naturales y al fortalecimiento de una cultura de protección civil que le permita a la sociedad reaccionar adecuadamente en caso de alguna contingencia. “Las Instituciones de Educación Superior tienen un papel muy importante que desempeñar en torno a la protección civil a través de la educación, investigación y concientización a la población sobre esta problemática que es cada vez más grave”, aseguró.
Enfatizó la necesidad de crear conciencia, sobre todo entre los niños, acerca de los efectos negativos que tienen los fenómenos naturales, los cuales ocurren cada vez con mayor frecuencia y magnitud.
Comentó que al crear los prototipos simuladores de esos fenomenos extraordinarios, es posible hacer sentir a la población de manera realista, lo que ocurre en esas situaciones desastrosas, y prepararla para escuchar la explicación científica del fenómeno y motivarla para que se prepare ante futuras contingencias.
Finalmente, el especialista politécnico refirió que con el apoyo del Grupo Topos (Asociación Civil) -constituido por especialistas en el rescate y atención de la población en caso de desastres- y autoridades de protección civil del Distrito Federal, se realizará en este año una exposición itinerante con los simuladores, la cual se planea llevar a escuelas primarias, con el propósito de que los niños y la población en general aprecien de cerca la recreación de los fenómenos naturales. “A fin de reforzar la simulación de los desastres, se organizará una serie de pláticas para mejorar los conocimientos adquiridos mediante demostraciones”, concluyó.
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