- El integrante del Instituto de Neurobiología, Jorge Larriva Sahd, recibió la Neurona de Plata, máximo reconocimiento que otorga el Instituto Santiago Ramón y Cajal
- Por primera vez, la también distinción del Consejo Superior de Investigaciones Científicas de ese país, se concede a un científico americano
- Utilizó, de manera exitosa, las mismas técnicas de Ramón y Cajal, y realizó narraciones y resúmenes científico-monográficos sobre la vida de Rafael Lorente de Nó
El investigador del Instituto de Neurobiología (INB) de la UNAM, Jorge Larriva Sahd, recibió la Neurona de Plata, máximo reconocimiento que otorga el Instituto Santiago Ramón y Cajal de España, por una sucesión de trabajos en los que descubre siete tipos neuronales relacionados con las respuestas cerebrales a la adaptación, en particular al estrés.
La distinción de esta institución, perteneciente al Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) de ese país, por primera vez, se concede a un científico del continente americano.
El galardón también se otorgó por la trayectoria del neurobiólogo mexicano y por la utilización exitosa de las mismas técnicas empleadas por Ramón y Cajal, y por las narraciones y resúmenes científico-monográficos sobre la vida de Rafael Lorente de Nó, discípulo del Premio Nobel de Medicina 1906.
Tras recibir el galardón escultórico, cuyo motivo es una neurona de plata observándose a sí misma, entregada por el director del Instituto Cajal, Alberto Ferrús, Larriva Sahd destacó las aportaciones de Lorente de Nó y comentó que los tipos neuronales por él descritos están relacionados con el procesamiento de estímulos que provocan la tensión nerviosa.
Los estudios del especialista en los últimos ocho años, le llevaron a distinguir distintas neuronas en la sustancia blanca del cerebro y bulbo olfativo, hallazgo que reportaron en dos publicaciones en 2004, 2006 y una más en prensa, donde se describieron siete tipos neuronales en un área cerebral que globalmente se conoce como septum, y la forma como están organizadas en circuitos, para el funcionamiento del individuo vivo.
Estas neuronas descritas y su organización, precisó Larriva Sahd, tienen relación con las respuestas cerebrales de adaptación, en particular al estrés, éstas neuronas parecen tener relación con la capacidad de reclutamiento de estímulos heterogéneos que provocan una respuesta general de adaptación, como aumento de la frecuencia respiratoria, sudoración e incremento de la velocidad del metabolismo, entre otros, a fin de responder de manera adecuada.
La Neurona de Plata reconoce la trayectoria científica destacada o la contribución sustantiva en el área de las neurociencias, y ha sido entregada con anterioridad a Washington Bruño y a Facundo Valverde, por su desempeño dentro del Instituto Cajal, y a Juan Lerma, por el descubrimiento de los receptores kainato. Al tiempo, accedió a la dirección del Instituto de Neurociencias en Alicante.
Larriva Sahd conoció a Rafael Lorente de Nó en la Universidad de California, en Los Ángeles, cuando realizaba una estancia posdoctoral en los años 80. Con él, aprendió técnicas de impregnación argéntica, pasando de ser uno de los últimos discípulos a amigo personal y tratarle hasta poco antes de su fallecimiento en 1990.
Tal fue el aprecio de Lorente de Nó para con su alumno, que poco antes de morir le obsequió con su microscopio personal, varios cientos de sus dibujos científicos originales, cajas de preparaciones histológicas y su biblioteca.
El galardonado hizo énfasis en que uno de los objetivos centrales de la neurociencia es establecer la secuencia de células y la forma cómo participan en las diferentes conductas y reflejos de los seres vivos, conocimiento necesario para diseñar estrategias que permitan administrar drogas o aún restituir los receptores neuronales, en circunstancias de lesión o enfermedad, para restablecer la función nerviosa, concluyó.
Créditos: Universidad Nacional Autónoma de México (www.unam.mx)
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