El Hospital Universitario de Puebla (HUP), junto con cinco instituciones del país formará parte de un grupo de investigación a nivel mundial que busca introducir una vacuna intradérmica contra el cáncer de mama, informó José Luis Gutiérrez Herrera, Jefe del área de Oncología del HUP.
Tras mencionar que el cáncer de mama se ha convertido en una “epidemia para la mujer moderna”, que mata a 10 mujeres mexicanas diariamente, agregó que un laboratorio internacional dará inicio a la fase tres de experimentación para el manejo de la vacuna preventiva del cáncer de mama.
Señaló que a invitación de ese laboratorio, la unidad oncológica del HUP se incorpora a este proceso de investigación interinstitucional, que de lograr avances positivos podría presentar resultados en un promedio de diez años, lapso semejante al de la vacuna del papiloma.
Gutiérrez Herrera reconoció que esta fase de investigación representa ya un gran paso para la oncología y para la BUAP, que podría beneficiar a miles de mujeres que se ven afectadas por cáncer de mama en el mundo.
Expresó que el HUP fue seleccionado para participar en esta investigación debido a que cuenta con un Centro Oncológico de experiencia y personal capacitado para incorporarse a este protocolo de investigación, a partir del tratamiento, entre 2000 y 2007, de un promedio de 144 casos de cáncer de mama en mujeres, cuyas edades fluctúan entre los 45 y 60 años de edad y un caso extraordinario de cáncer en una paciente de 19 años.
En este sentido, el Jefe de Oncología del HUP aseguró que a partir del viernes 22 de febrero iniciaron un servicio gratuito para detección temprana de cáncer de mama, mediante el uso de cuestionarios para conocer factores de riesgo y difundir la necesidad del método preventivo adecuado.
“De acuerdo a información del Instituto Nacional de Cancerología, sólo un cinco por ciento de casos en México son detectados en etapa inicial, arriba del 30 por ciento son detectados en etapa uno o dos; y que conforme va aumentando el estadío, la sobrevida de la persona afectada es menor.
Abundó que el índice de sobrevida, cuando el cáncer de mama es detectado en etapas iniciales es de un 80 por ciento, pero que en la etapa cuatro representa una mortalidad del 90 por ciento.
“El aumento en casos de cáncer de mama, tiene mucho que ver con la adquisición de hábitos y costumbres “occidentalizados” de las mujeres, como son el consumo de alcohol, tabaco, comida chatarra y sedentarismo”, añadió.
Créditos: Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (www.buap.mx)
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