Uno de los más graves errores de la educación tradicional es fomentar que los alumnos aprendan las cosas sin entenderlas, esto no les fomenta el hábito de investigación y por consecuencia, no se les enseña a pensar, explicó la maestra Lydia Alicia Rodríguez Jiménez, Especialista en Desarrollo de Habilidades del Pensamiento de la Dirección de Desarrollo en Integración Estudiantil (DDIE) de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla.
La Especialista indicó que las personas recuerdan apenas un 20 por ciento de los detalles que perciben durante el día, y que la demás información se dirige al material inconsciente, por ello la importancia del razonamiento para aprovechar la mayoría de los sucesos que distinguimos.
Frente al modelo de enseñanza tradicional, algunos educadores y pedagogos postulan la alternativa de un aprendizaje activo y significativo que conduce a una enseñanza centrada en el pensamiento. Por lo tanto, surge el movimiento de enseñanza de Desarrollo de las Habilidades del Pensamiento (DHP), que se empieza a gestar en la década de los años Setenta.
En esta época se manifestó un descontento generalizado en el campo de la enseñanza por la insuficiencia de los programas de estudios de las escuelas tradicionales para desarrollar las potencialidades intelectuales de los estudiantes. Como consecuencia, empezaron a proliferar en diferentes países (Canadá, Estados Unidos, Inglaterra), proyectos en los que se encuentran diversas teorías del aprendizaje, de la inteligencia y del desarrollo cognitivo, que tienen en común el desarrollo de las capacidades y habilidades de los estudiantes.
Rodríguez Jiménez explicó que el DHP se despliega en diversas etapas: “consiste en desenvolver las estructuras cerebrales que nos ayudan a desarrollar los diferentes tipos de pensamiento, como el crítico, el reflexivo, así como para tomar decisiones de manera razonada”.
Los estudiosos de este tema, pueden aplicar sus conocimientos al momento de impartir sus clases, no solamente con alumnos de niveles de educación básica, sino también con estudiantes de nivel superior: “es recomendable comenzar con los alumnos desde que son jóvenes, para que se acostumbren a trabajar de esta forma desde pequeños, implementándoles procesos básicos como la observación, la descripción, las diferencias, semejanzas o clasificaciones”, abundó.
Mencionó que al uso de los procesos básicos, le siguen la solución de problemas, se desarrolla la creatividad y se continúa desarrollando los procesos hasta llegar a la inteligencia práctica.
“Actualmente la SEP no implementa este modelo de trabajo como parte de la educación obligatoria; se viene trabajando de esta manera con el DHP en algunas escuelas particulares, y hay maestros de escuelas públicas que deciden implementarlo por su cuenta a los alumnos. Considero que debería ser una asignatura obligatoria en todas las escuelas oficiales y particulares y en todos los niveles”, indicó la experta.
Rodríguez Jiménez mencionó acerca de la labor de la Universidad en el desarrollo del modelo DHP con alumnos de nivel superior: “algunos maestros en las preparatorias de la BUAP sí lo implementan; en el Departamento de Orientación Educativa ubicado en Ciudad Universitaria han llegado alumnos de licenciaturas con bajo rendimiento a pedirnos apoyo académico; nos han manifestado que esto les ha ayudado mucho en su forma de estudiar y que han mejorado su aprendizaje de manera muy notoria”, concluyó.
Créditos: Benemérita Universidad Autónoma de Puebla(www.buap.mx)
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